SERES ESPIRITUALES
Por el doc. Gustavo Rubio D.
Nosotros no somos seres humanos viviendo experiencia espirituales; acá en la tierra; sino seres espirituales, viviendo entre humanos para continuar con la obra salvadora de nuestro Señor Jesucristo, según el Libro de Mat 28, art 19 al 20.
Porque digo que no somos seres humanos, porque en las escrituras de S/ Jn 1: 9-13 dice que los que hemos creído en esa luz que ha venido al mundo, que es Jesús; nos ha dado potestad de ser hechos hijos de Dios y que no somos engendrados por voluntad de sangre ni de carne ni de varón, sino de Dios.
Luego en S/ Jn 3:6, tmabien dice que los que han nacido de la carne, carne son pero los que hemos nacido del agua y del Espíritu, espíritu somos.
Aunque el resto de los humanos nos ven iguales a ellos, porque vivimos dentro de un cuerpo de carne como ellos, pero no militamos según sus costumbres, porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando todo argumento y toda altivez que se levante contra los estatutos normas y reglamentos de la constitución universal de Dios.
Y estamos prontos para castigar toda desobediencia, cuando nuestra obediencia sea perfecta 2º libro de Corintios 10: art 3 al 10
Toda la grey de Cristo, deben saber y creer esto para que lo enseñen en las comunidades cristianas, ya que de esta manera, le será mas fácil, a nuestro espíritu, mantener constantemente, la renovación de la mente, mediante el conocimiento, hasta llegar a la imagen del que nos crio. Libro de Efesios 4: art 23 y libro de Colosenses 3: art 10
Solo así nos mantendremos sobrios, firmes y vigilantes para estar siempre prestos en él y así caminaremos seguros en todo tiempo. Y frente a toda situación de tentación o peligro, nos recordara y nos infundirá aliento para resistir en el día malo. 1ª libro Tesalonicenses 5: arts 5-8
Firmes en el amor de nuestro señor Jesucristo todos los días. Y por la gracias que Dios no ha dado en ser sus administradores de su multiforme gracia. Les enviamos toda clase de bendición y ustedes tomen por fe lo que necesiten y también lo que deseen, para que nuestro padre celestial sea glorificado en todas las naciones y para que el mundo vea que en verdad El nos ama a nosotros también como a nuestro señor Jesucristo.